Por Alexander Vicens,
MBA en Administración del Turismo Sostenible, Magister en Dirección Estratégica.
De la mano de Turismo a Tiempo vamos a iniciar una serie columnas enfocadas en los destinos de temporada, pero con la intensión de facilitar al turista la toma de decisión con las herramientas para generar impactos positivos en la comunidad de destino, enriquecer su experiencia y ayudar al planeta.
En este caso, pretendemos demostrar que se pueda viajar y disfrutar, ser responsable con el planeta y contribuir con La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, adoptada por todos los Estados Miembros de las Naciones Unidas en 2015; agenda que proporciona un modelo compartido para la paz y la prosperidad para las personas y el planeta, ahora y en el futuro. En su corazón se encuentran los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que son un llamado urgente a la acción de todos los países, desarrollados y en desarrollo, en una asociación global. Estos objetivos reconocen que acabar con la pobreza y otras privaciones deben ir de la mano con estrategias que mejoren la salud y la educación, reduzcan la desigualdad y estimulen el crecimiento económico, todo al mismo tiempo que abordan el cambio climático y trabajan para preservar nuestros océanos y bosques.
En este orden de ideas, el reto que debe tener quienes ofrecen servicios turísticos, es pasar de turísticas los paquetes a las experiencias turísticas, ya que de hecho el no hacerlo es un grave error, teniendo en cuenta que el viajero de hoy, organiza sus propios viajes y no depende de ofertas estandarizadas ya sea a destinos inexplorados como a destinos conocidos, y para el caso presente trataremos a Cancún desde este nuevo enfoque que propone este escrito.
Cancún, como destino turístico consagrado del Estado mexicano de Quintana Roo, ofrece más que vacaciones de primavera, hoteles de lujo, discotecas y playas, ya que el misterio y la historia también forman parte de la oferta.
Por ello y si se quiere vivir una experiencia diferencial en este destino no dejar de visitar el El Museo Subacuático de Arte (MUSA) mundo increíble y esculturas hechas por el hombre que forman parte de la fauna marina y que se ve claramente en las aguas celestes del caribe mexicano.
La gran pregunta es ¿cómo contribuyo con esta visita a generar un impacto positivo al planeta? Pues aquí se está aportando directamente a dos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible – ODS como es el número 14 que hace referencia a la protección de la vida marina y al ODS número 1: Fin de la pobreza, ya que los guías, salvavidas y el personal de atención son personas que residen en Cancún, no forman parte de las grandes cadenas hoteleras y con el pago de tu visita contribuyes a generar empleo y desarrollo a las familias locales.
Si quieres saber más de este maravilloso y único lugar visita:
