26 de diciembre de 2019
El “Amarillo Monseñor” o “Amarillo a la Monseñor”, es uno de los platos emblemáticos de la gastronomía llanera y está cumpliendo 40 años.
Su creador fue Carlos Infante, quien era el chef del Hotel del Llano 1979. Su hija, Alexandra, recuerda que su padre contaba que ese año hubo una abundancia inusual del “Amarillo”, un pescado común especialmente en el Río Meta.
A Carlos Infante se le pidió que creara diversas preparaciones del pescado de temporada pues evidentemente resultaba muy rentable por los bajos precios que tenía por esos días debido a la inesperada sobreoferta.
Justo por esos días el Gerente del hotel le anunció al chef que debía preparar una cena especial para Monseñor Gregorio Garavito, Obispo de Villavicencio, quien atendería allí a un grupo de distinguidos invitados.
Fotos: Instituto de Turismo del Meta.
El chef cortó la pechuga del pescado en cubitos de 2cm. x 2 cm., agregó champiñones, camarones, queso parmesano, vizcaína, salsa bechamel, vino y huevos de codorniz. Y finalmente, puesto en una cazuela de barro, lo gratinó.
Monseñor Garavito quedó tan impactado por la deliciosa creación que buscó al chef en la cocina y le preguntó cómo se llamaba ese exquisito plato que les había preparado. “Hasta ahora no tiene nombre, pero en su honor lo llamaré Amarillo Monseñor”, respondió el chef.
Si va a Villavicencio, no lo dude. Es un gusto para el paladar que debe darse siquiera una vez en la vida.
