Mercadeando la sostenibilidad

Por Alexánder Vicens

Lo más común es creer, que el solo sello de calidad o sostenibilidad son las mejores formas que un prestador de servicios turísticos tiene para “venderse” de forma diferenciada; es decir son “la garantía” ante nuestro mercado.

Sin embargo señor prestador, debe partir de una realidad: Casi el 90 % de los turistas en Colombia y casi un 99.9 % de los turistas internacionales no tienen la menor idea de lo que es el sello de calidad turística colombiana, con la que el gobierno nacional reconoce la calidad o la sostenibilidad en la industria turística.

Es por ello que independiente que la legislación nacional que obligue a la implementación de la sostenibilidad en la industria turística o a las campañas del gobierno para promover el sello de calidad turística colombiana ante el cliente turístico, debe tener en cuenta que si “realmente” y no por un “requisito” está implementando la sostenibilidad, debe ir mas allá de un “sello” para que usted perciba un retorno de la inversión de la sostenibilidad en doble vía: mejores procesos internos de gestión que lo llevan al ahorro y lo segundo y quizás más importante, un mercado de turistas que reconoce sus esfuerzos en sostenibilidad.

Por ello la certificación de las Normas Técnicas de Sostenibilidad – NTS  debe representar una oportunidad de negocio que a la fecha muy pocos prestadores de servicios turísticos ven su potencial.

Debe tener claro que respuesta o cambio de comportamiento espera de sus clientes con las acciones de sostenibilidad que implementa. De igual manera aparte del tipo de respuesta que espera de sus turistas, debe tener en cuenta que impresión quiere dejar ante ellos, en cuanto a ser un facilitador para conocer auténticamente el destino por parte de los viajeros, si sus acciones de sostenibilidad buscan con el cliente la participación y/o diversión del cliente; ser un vehículo para prestar un mejor servicio y por ello cobrar más que la competencia o en ultimas generar empatía. Y a cada una de estas respuestas esperadas del cliente, debe traducirlas en términos monetarios: ¿puedo cobrar más por el nuevo servicio? ¿Genero nuevas líneas de negocio? ¿Estoy llegando a nuevos mercados?

De igual forma, debe medir claramente como funciona sus acciones de sostenibilidad a través de sus canales de venta, porque retomando el inicio de esta columna, el sello de calidad es importante pero no es el todo; el sello lo debe hacer “vivo” a sus clientes antes de la compra, durante la compra, entre compra y llegada, durante la estancia en el destino y cuando el turista vuelva a su lugar de origen.

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