Recorrer Salento es emocionante. Es como caminar por la versión viva del Pueblito Paisa.
Las fachadas de las casas son blancas y las puertas y ventanas en madera contrastan con sus vivos colores. Salento es un museo vivo de la época de la colonización antioqueña.
Para llegar desde Medellín a este municipio del departamento del Quindío hay que salir por el Suroeste y pasar por Pereira. De allí se toma la ruta hacia Armenia y por un desvío se ingresa a esta población. En un automóvil particular el viaje toma poco más de 5 horas.
Es el municipio más antiguo del Quindío (fundado en 1842) y tiene apenas 3.000 habitantes en su área urbana. En los últimos años se ha convertido en un referente del turismo en la región, por lo que ofrece una buena cantidad de hoteles, hostales, fincahoteles, restaurantes y bares.
Dos son los planes que nunca pueden faltar cuando se viaja a Salento. El primero es caminar la Calle Real, donde el visitante encontrará una completa y diversa feria artesanal permanente. Al fondo está el mirador desde donde se puede observar una amplia panorámica. El otro atractivo imperdible es el Valle del Cocora. Ubicado a 10 kilómetros del casco urbano, ofrece un paisaje inolvidable, donde la frecuente neblina sirve de marco para observar la palma de cera del Quindío, declarado árbol nacional y que en esta zona se encuentra en gran número.
Desde Salento también es fácil y económico desplazarse a los muchos atractivos del eje cafetero, como Panaca, el Parque Nacional del Café, Recuca, el balsaje por el Río La Vieja, etc.
Una excelente opción para su próximo viaje.
