
Una curiosa lista de destinos recomendados se dio a conocer esta semana: la de lugares donde es posible comer quesos que, por alguna razón, tienen valor cultural o se consideran propios de una región.
El listado lo hizo la plataforma Booking para los amantes de la comida que buscan descubrir la autenticidad del queso en los mismos lugares donde se producen. Esta es la selección de destinos recomendados:
En Boyacá, se produce uno de los alimentos colombianos con Denominación de Origen Protegida (DOP), lo que garantiza que solo se puede producir en esta región y con técnicas tradicionales.
Se elabora con leche de vaca, tiene una textura semidura y un sabor ligeramente ahumado debido a su proceso de maduración. Es un infaltable en la gastronomía boyacense y se usa en recetas típicas o acompañado de un pan artesanal.
Para vivir una experiencia completa, Paipa Cheese Experience es el mejor lugar para probar este queso. Este innovador espacio ofrece degustaciones, catas con maridaje de vinos y una explicación detallada sobre la historia y los procesos de maduración del queso Paipa.
- Cuajada – Bogotá.
La primera parada es la cuajada, un queso fresco y sin sal que se obtiene al cuajar la leche mediante un proceso natural. En Colombia, es tradicional acompañarla con melao (melaza de panela), lo que crea una combinación perfecta entre lo salado y lo dulce. Este postre es típico de Bogotá y de los pueblos de Cundinamarca, donde se sirve como un cierre ligero y delicioso después de un almuerzo contundente.
Una opción para probarla es La Puerta Falsa, el restaurante más antiguo de Colombia, con una historia de más de 200 años sirviendo platos tradicionales colombianos, incluyendo la cuajada con melao.
- Queso siete cueros. Ubaté, Cundinamarca.
A poca distancia de Bogotá se encuentra Ubaté, un municipio reconocido porque allí se produce uno de los quesos más exquisitos del país, el siete cueros. Es un queso cremoso, con un sabor ligeramente ácido y mantecoso.
Su nombre proviene de la forma que se le da en el proceso de elaboración, ya que tiene varias capas finas, como si fueran «siete cueros». Por eso, uno de los grandes placeres de la vida es desprender con los dedos cada capa de queso y comerlo con un buen café.
Se puede encontrar en el Mercado Campesino de Ubaté, los visitantes pueden encontrar queso siete cueros directamente de los productores locales, quienes lo ofrecen en diferentes grados de maduración.
En la región de Huila es muy común verlo envuelto en hojas de plátano para mantener su frescura. Su suavidad y capacidad de fundirse lo hacen perfecto para recetas como arepas rellenas, empanadas y hasta postres típicos.
Se caracteriza por su sabor suave y ligeramente dulce, lo que lo hace ideal para comer solo o con miel y bocadillo.
Para probarlo, Booking recomienda a Quesillos Misis, un lugar ideal que tiene más de 50 años de historia dedicado a la producción artesanal de quesillo y ha mantenido viva la receta tradicional.
Este queso, propio de la gastronomía del Caribe colombiano, se distingue por su textura compacta y su alto contenido de sal, lo que lo hace ideal para acompañar arepas, bollo limpio, mote de queso y hasta platos más innovadores como el arroz de queso. Su método de conservación tradicional permite que resista el clima cálido de la región sin necesidad de refrigeración, lo que lo convirtió en un alimento esencial para las comunidades ganaderas de la zona.
Un buen lugar para conocerlo es El Mercadito del Sur, un mercado tradicional donde los productores locales lo venden en diferentes presentaciones. Aquí, los visitantes pueden encontrar quesos recién hechos traídos directamente de las fincas ganaderas cercanas.